Armada de Colombia «retira» a oficiales e infantes de marina por lanchas artilladas “llevadas por la corriente” a Venezuela

El comandante de la Armada de Colombia, Evelio Ramírez, anunció el «retiro» de un coronel, un capitán, tres suboficiales y nueve infantes después de que el pasado 9 de mayo se hallaran tres embarcaciones de guerra completamente artilladas de ese cuerpo castrense en las aguas del río Orinoco, en territorio venezolano.

Durante una rueda de prensa, Ramírez dijo que durante las investigaciones internas «se encontraron fallas en la responsabilidad de mando, planeamiento, control y supervisión» por parte de un coronel de infantería de Marina, comandante del Batallón de Infantería número 51, y un capitán de Infantería que se desempeñaba como jefe de operaciones.

De acuerdo con el alto mando, los retiros surgen «como consecuencia de los hechos ocurridos», ya que «el lugar donde fueron asegurados los botes no cumplía con las condiciones de estabilidad del terreno y amarres seguras».  Aseveró  que las lanchas artilladas no pueden estar juntas «por capacidad de supervivencia».

Las embarcaciones fueron halladas el pasado 9 de mayo, sin tripulantes. Justamente cuando en Venezuela varios grupos terroristas se encontraban huyendo tras el fracaso estrepitoso de una invasión armada con mercenarios, incluidos dos exboinas verdes del ejército de Estados Unidos (EE.UU.), Los capturados confesaron que habían sido entrenados en Colombia, desde donde zarparon en lanchas rápidas artilladas desde la Alta Guajira hacia las costas centrales de Venezuela.

Desde Bogotá, las autoridades al ser descubiertas las lanchas en el Orinoco, aseguraron que habían sido «arrastradas por la corriente» hasta territorio venezolano. Atendiendo esta excusa, el Comandante aseguró que «las autoridades colombianas insistirán hasta la saciedad» para que Venezuela «regrese los botes» pues cada uno de ellos está valorado en más de 170 millones de pesos (44.000 dólares aproximadamente) «sin incluir el armamento a bordo».

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, afirmó tras el hallazgo del material de guerra colombiano que lo devolvería inmediatamente, pero antes le correspondía al mandatario de Colombia solicitarle oficialmente el regreso de este equipo militar.

La petición no es gratuita, puesto que Bogotá se niega a reconocer la autoridad del mandatario venezolano y solo considera al diputado Juan Guaidó como «presidente interino» del país, luego de que este se autoproclamara el año pasado.

Comandante de la Armada colombiana ordena reemplazar embarcaciones artilladas halladas en Venezuela
Foto: Archivo

Maduro denunció que, tras las confesiones de varios terroristas detenidos, no había «ninguna duda» de la participación del mandatario colombiano, Iván Duque, bajo las ordenes de su homólogo estadounidense, Donald Trump, en la operación.

El ministro de Asuntos Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza, en entrevista con la emisora colombiana Caracol Radio señaló que es poco frecuente que embarcaciones artilladas de patrullaje, que incluso se usan para operaciones letales, «simplemente se dejen llevar por la corriente».

El Canciller adelantó que la Armada venezolana y la Fiscalía realizan investigaciones para determinar cómo fue que las lanchas llegaron hasta allí. «Las embarcaciones fueron ubicadas pero nosotros no descartamos nada, y mucho menos después de los acontecimientos recientes y las denuncias que venimos haciendo, desde 2018, sobre campos de entrenamientos de mercenarios y paramilitares en Colombia para atacar territorio venezolano», dijo Arreaza, según publicó RT.

Reiteró que la complicidad del gobierno de Duque con los grupos mercenarios es evidente. El involucramiento de las autoridades colombianas por complicidad y por acción directa es más que obvio”, remarcó, informando que Venezuela acusará a Duque ante la Corte Penal Internacional (CPI).

La Armada de Colombia reiteró y juró que los tres botes «se encontraban en un Puesto de Control Fluvial amarrados a la orilla del río Meta, en el departamento del Vichada, en la frontera colombo-venezolana», y que en el momento en que estuvieron sin tripulación, «fueron arrastrados por la corriente».

Esta afirmación de los militares colombianos provocó una oleada de burlas y memes en el ciberespacio.

La senadora colombiana Piedad Córdoba, se indignó ante la desvergüenza de Iván Duque, que ante la comprometedora verdad con el apoyo de mercenarios y asesinos, que su gobierno prefirió quedar en ridículo con la versión ofrecida mundialmente.   /CP