El producto, derivado de aloe vera y ramas de olivo, ha sido probado con éxito en ratones y deberá ser ahora testado clínicamente por la industria farmacéutica.
Si cogemos una rama de aloe vera y quitamos su corteza verde, en el interior acabarás por encontrar una especie de gelatina casi transparente que es pegajosa. También trabajando con algo tan común en el sur de España como las ramas de olivo podemos obtener hidroxitirosol, que tiene un gran poder antioxidante. Y si se mezclan estos dos componentes, obtienen un producto que contribuye a cebar ese sueño de muchas personas, que es comer sin engordar.
Aunque eso no es lo que logran –ni pretenden– las científicas que han conseguido este revolucionario producto, su hallazgo abre una nueva vía en la prevención del sobrepeso, el tratamiento de la obesidad, o enfermedades como la diabetes tipo 2, dolencias que afectan a más de un 15% de la población española.
«Conocíamos estudios previos, por separado, de estos dos componentes –del aloe vera y del olivo–siempre trabajamos la medicina natural y la medicina tradicional, el aloe y el hidroxitirosol son viejos conocidos, pero nos vino la chispa y decidimos investigar una combinación de ambos productos», explica a Sputnik una de las cuatro responsables del hallazgo, Ana Quílez Guerrero.
La línea de investigación ‘CTS-388 Plantas Medicinales’ lleva en marcha más de ocho años y ofrece un producto que podría cambiar la vida de millones de personas con una respuesta natural y sin efectos secundarios en la prevención del sobrepeso. CC //SC
Fuente: Sputnik