¿Cómo afecta el estrés tus hábitos alimenticios?
El estrés y la depresión hoy en día son padecimientos bastantes cotidianos y comunes, debido a la crisis económica y post pandemia. Sin embargo, más allá de la fatiga y el desgaste emocional, el primero, y también el segundo, puede provocar cambios en nuestra alimentación por extraño que parezca.
En realidad, tu alimentación sí se ve afectada tanto por el estrés, como por la depresión, que muchas veces es ocasionada por el estrés, uno de los síntomas de la mala salud laboral. Mientras para algunas personas incrementa el hambre y ansiedad, para otras disminuye el apetito.
Según la Pontificia Universidad Católica de Chile, cuando te sientes estresada, «es común tender a consumir alimentos y cantidades no saludables de comida, con el fin de esconder pensamientos y sentimientos pesimistas sin sentir hambre realmente».
Una de las maneras en que el estrés puede afectar tu alimentación son los cambios de apetito. Es común que algunas personas tiendan a perder el apetito por completo, mientras que otras pueden comer en exceso como una forma de lidiar con el estrés. Ambos hábitos son preocupantes.
Bajo estrés, las personas a menudo tienden a recurrir a alimentos procesados, ricos en grasas y azúcares simples, ya que estos alimentos pueden proporcionar una sensación momentánea de confort. Sin embargo, este tipo de alimentos generalmente carecen de nutrientes esenciales y pueden empeorar los efectos negativos del estrés en el cuerpo a largo plazo.
Fuente: Medios internacionales
VTV/YD/EMPG