Descubren relación entre síndrome de Down y fragmentos móviles de ADN

Investigadores de IrsiCaixa y el Centro de Regulación Genómica (CRG) identificaron en un modelo de ratón con síndrome de Down una desregulación de fragmentos móviles de ácido desoxirribonucleico (ADN), y han demostrado que esta se podría revertir con un antirretroviral, la lamivudina. Los resultados  se publicaron en la revista Frontieras in Aging Neuroscience, y revelan nuevas oportunidades para utilizar la lamivudina en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas.

El estudio demuestra por primera vez que los retrotransposones, fragmentos de ADN con la capacidad de moverse por el genoma y alterar la expresión de genes, se expresan de manera anómala en el síndrome de Down. “Sabemos que, al moverse, estos fragmentos de ADN pueden alterar la expresión de genes”, comentó la primera autora del artículo, Alessandra Borgognone.

El equipo identificó, en un modelo preclínico del síndrome de Down, qué ciertos genes relacionados con el deterioro neurológico están sobreexpresados, lo que contribuye a la patología asociada a este síndrome. Asimismo, se determinó que la administración de lamivudina, un antirretroviral contra el Virus de Inmunodeficiencia Humana, normaliza la expresión de algunos de estos genes.

La manera de actuar de los retrotransposones es similar a la de los virus, pero sin tener capacidad infectiva, ya que pueden copiarse e insertarse en nuevas regiones del genoma, alterando la expresión de genes. La lamivudina inhibe el movimiento de los retrotransposones. «Hemos querido estudiar si realmente había un incremento en la actividad de los retrotransposones en el síndrome de Down, y ver qué pasaba si impedíamos su actividad», declaró el investigador principal del estudio, Aleix Elizalde-Torrent,.

Anomalía genética normalizada con lamivudina

El equipo investigador analizó la expresión génica en tejidos cerebrales de modelos preclínicos de síndrome de Down e identificó que los fragmentos de ADN móviles están sobreexpresados en comparación con ratones normales. Asimismo, se identificó una desregulación de numerosos genes cruciales para la función neuronal, especialmente en los cromosomas 16 y 17 del ratón, equivalente al cromosoma 21 humano, alterado en el síndrome de Down.

«Hasta ahora, no se había demostrado que estos retrotransposones estaban alterados en el síndrome de Down, abriendo nuevas posibilidades de tratamiento con lamivudina», señaló la coautora del estudio, Mara Dierssen. Los resultados se alinean con comentado por Dierssen, ya que los ratones que recibieron lamivudina recuperaron la correcta expresión de algunos de los genes alterados en el modelo murino de síndrome de Down.

Fuente: SINC

VTV/DC/SB