Escandalosos audios de Hernán Alemán revelan que DEA y empresas de EE.UU. financian plan mercenario en Venezuela
El vicepresidente sectorial para Comunicación, Turismo y Cultura, Jorge Rodríguez, mostró este lunes nuevas pruebas sobre la participación de la administración de Donald Trump, la extrema derecha venezolana y el narcotráfico con apoyo de la DEA, en la planificación, financiamiento y apoyo a grupos de mercenarios terroristas para atacar a Venezuela, cometer magnicidio y disolver la Constitución Bolivariana.
A partir de una serie de pruebas recopiladas gracias a fuentes de inteligencia en el seno de la Fuerza Armada colombiana, el Gobierno venezolano tuvo acceso a horas de grabación que incluyen un audio del diputado Hernán Alemán, en el que reconoce la participación del Departamento de Estado, la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y el embajador de Estados Unidos en Colombia, James Story, en la conformación de grupos mercenarios para ejecutar acciones terroristas en suelo patrio.
El diputado por Acción Democrática, prófugo de la justicia venezolana, no solo releva la implicación de la administración de Trump en los hechos, sino además al conversar con otro sujeto aún por identificar, señala el levantamiento de los campamentos mercenarios en Riohacha, el envío de mercenarios hacia la Alta Guajira colombiana, la comunicación constante con antonio Sequea y se refiere a los uniformes con bandera norteamericana incautados en el estado Zulia.
«Hernán Alemán mantiene nexos muy cercanos con Luisa Ortega Díaz y su esposo Germán Ferrer, así como con, Sair Mundarín, quien era el ejecutor de todos los crímenes de Luisa Ortega en Venezuela y ahora en Colombia», denunció el también Ministro para Comunicación y la Información.
Rodríguez precisó que según el propio testimonio voluntario de Sequea, líder operativo de la incursión armada de grupos terroristas entrenados en Colombia, los pertrechos militares incautados en la entidad zuliana no iban a ser utilizados por los mercenarios que intentaron ingresar por las costas venezolanas sino que serían empleados por tropas estadounidenses que iban a ingresar al país.
En otro audio entre el parlamentario Hernán Alemán y el narcotraficante Clíver Alcalá Cordones, quien está protegido por la DEA, se asegura que la intención del plan era asesinar al presidente Maduro, al presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello; a la primera Combatiente Cilia Flores, al ministro de la Defensa, G/J Vladmir Padrino López, al opositor Leopoldo López, entre otros, fingiendo una supuesta fuga, una vez que fueran capturados por los mercenarios.
En otra comunicación entre Alemán, Alcalá y otro sujeto por identificar, se revela que los planes además incluían volar el Palacio de Gobierno, volar el Palacio Blanco, ambos ubicados en el centro de Caracas, donde se residencian miles de civiles.
Asimismo, se reconoce que inversionistas ya le habían depositado a J.J. Rendón la suma de 300 millones de dólares para pagar el contrato mercenario con SilverCorp. «En el penthouse que J.J. Rendón adquirió con dinero del narcotráfico en Florida, los inversionistas hicieron una colecta. J.J. Rendón les tendrá que explicar por qué no les pagó», aseguró Rodríguez.
El audio también asegura que las principales donaciones fueron realizadas por la DEA e inversionistas, principalmente de empresas norteamericanas. «A los venezolanos le dejaron dos contratos, tenemos los nombre de dos y estamos investigando para presentar más pruebas», precisó el Vicepresidente Sectorial para Comunicación, Turismo y Cultura.
En el mismo audio dado a conocer este lunes, Clíver Alcalá asegura que los «fantasmitas», como denomina a los dos mercenarios norteamericanos Luke Alexander Denman y Airan Berry, iban a participar en la operación de asesinatos selectivos y de masas en el país.
Las investigaciones y el proceso de delación al que se han acogido voluntariamente los sujetos capturados, reconocen que se utilizó la Fundación Futuro Presente de Yon Goicoechea, vinculada a Voluntad Popular, como fachada para encargarse del pago y la logística de grupos mercenarios paramilitares, incluído el grupo que organizó el intento de magnicidio en Caracas.
En ese sentido, Rodríguez añadió que se debe entrecomillar lo del pago de la manutención de los desertores ya que como es de conocimiento público, parte de ese dinero fue robado por Sergio Vergara, uno de los principales aliados de Juan Guaidó.
En otros testimonios que se dieron a conocer este lunes, destacan las confesiones de Pimienta Salazar, los dos mercenarios norteamericanos, quienes reconocen la prefiguración del triángulo criminal que involucra al Gobierno de EE.UU., la extrema derecha que promueve Guaidó y el narcotráfico colombiano, entre ellos a Elkin Javier López Torres, conocido con los alias de «La Silla» o «Doble Rueda», quien actúa impunemente en la Alta Guajira bajo la mirada cómplice de Iván Duque.
El ministro Jorge Rodríguez rechazó el ensañamiento del Gobierno de Donald Trump contra el pueblo venezolano, que enfrenta una dura batalla contra la Covid-19. Asimismo, reprochó que nunca antes un grupo político como el de de Juan Guaidó, había levantado una posición tan ajena a ser venezolano. «Se han paseado por todas las forma de negación de la venezolanidad (…) promueve la disolución de la Patria y solicita que Gobiernos extranjeros intervengan y llenen de muerte al país», denunció.
Otra de las revelaciones de estas investigaciones apuntan a que Yoel Palmar, narcotraficante convicto y confeso, solicitado en extradición, participaba como uno de los sujetos logísticos que la DEA colocó para la creación de un corredor mercenario hacia Venezuela.
También Rodríguez mostró una credencial otorgada por Luisa Ortega Díaz al narcotraficante Palmar.
Otras pruebas:
- Apuntes de los cuadernos de los mercenarios norteamericanos capturados indican que el Plan Júpiter pretendía asaltar en primera instancia a la sede de la Dirección de Contrainteligencia Militar (DGCIM), para hacerse con el parque de armas, asesinar a funcionarios y promover un ataque al Palacio de Miraflores.
- Igualmente los apuntes revelan la intención de asaltar la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), donde también pretendían asesinar a funcionarios y hacerse con armamento.
- El ataque procuraba el asesinato de cualquier persona y no contemplaba la toma de prisioneros.
- Uno de los mercenarios llamaba a Venezuela como el «cementerio» entre sus apuntes.
TESTIMONIOS REVELADORES
/maye
