Investigadoras venezolanas analizan bioinsumos alternativos
Un equipo de investigadoras venezolanas estudia la aplicación de bioinsumos, como fuentes nutritivas alternativas para los cultivos y aplicación del uso de prácticas agrícolas climáticamente inteligentes, mediabioinsumos con el objetivo de ofrecer a los productores y productoras del país fuentes innovadoras de nutrientes. Tal labor es desempeñada por las científicas, Mingrelia España y Marcia Toro. Este experimento se integra al proyecto RLA-5090 del Acuerdo Regional de Cooperación para la Promoción de la Ciencia y Tecnología Nucleares en América Latina y el Caribe (Arcal).
Al respecto, la Dra. España precisó que en Arcal participan 15 países de América Latina y el Caribe. “Este es un proyecto donde se fomenta el uso de prácticas agrícolas climáticamente inteligentes. Nosotros nos estamos enfocando en el uso de microorganismos con potencialidades biofertilizantes para reducir el uso de fertilizantes químicos”, explicó.
Agregó que este trabajo, que se realizará por un periodo de cuatro años, “también se está utilizando en otra zona cultivares resistentes a estrés hídrico, mutantes obtenidos a través de radiaciones inducidas y otra serie de prácticas”. El trabajo involucra la implementación de parcelas demostrativas en zonas productivas del país. Los dos primeros años se trabajaron con caraotas, por ser un rubro estratégico para la nación.
“Estamos terminando una de las primeras parcelas, que fue en caraota, un ensayo que se hizo, una parcela que se montó en Miranda en la zona de Pozo de Rosa; los productores van a poder ver, de primera mano, las ventajas del uso de estos bioinsumos”, refirió al tiempo que agregó que algo similar se realizará con caña de azúcar, “que son los dos cultivos que Venezuela tiene el compromiso de hacer estas parcelas demostrativas para poder rendir al Proyecto ARCAL, el proyecto RLA-5090”.
Prácticas climáticamente inteligentes
Precisó que la meta es fomentar el uso de estas prácticas climáticamente inteligentes para hacer un cambio de la agricultura, “sin menoscabar la productividad agrícola, pero, al mismo tiempo, mitigando los efectos del cambio climático y si es posible incrementar la productividad agrícola”. Con este trabajo se reduce el uso de fertilizantes nitrogenados en cultivos, que son altamente dañinos para los ecosistemas y no ofrecen resultados positivos para las siembras.
“La consecuencia es que más del 50% del nitrógeno que se aplica se pierde por volatilización que va a contribuir con efectos de gases del cambio climático o se pierde por escorrentía o por lixiviado y entonces contaminan los cuerpos de agua”, explicó la doctora España. Al finalizar la investigación, las naciones ARCAL deben presentar los resultados obtenidos, para generar políticas a nivel regional del uso de estos bioinsumos y de estas prácticas en general.
La doctora España se desempeña como investigadora de Agricultura y Soberanía Alimentaria de la Fundación Instituto de Estudios Avanzados (IDEA); mientras que la doctora Toro conforma el Instituto de Zoología y Ecología Tropical de la Universidad Central de Venezuela.
Fuente: Mincyt
VTV/DC/CP