Irán afirma que Hiroshima recuerda los crímenes de EE.UU. contra la humanidad
En declaraciones ofrecidas este sábado con motivo del 76.º aniversario del bombardeo atómico de Estados Unidos sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Said Jatibzade, ha denunciado que dicho ataque es un recordatorio de los crímenes estadounidenses contra la humanidad.
El vocero ha subrayado que la conmemoración de ese triste acontecimiento recuerda a las naciones del mundo la necesidad de perseguir y materializar el ideal exaltado de un mundo libre de todo tipo de armas nucleares, y corrobora que la sombra ominosa y la amenaza constante de tales armas siempre ponen en peligro la paz y la seguridad internacionales.
En este marco, ha señalado que las potencias nucleares del mundo, incluido Estados Unidos, en virtud de los acuerdos internacionales, y especialmente el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), han anunciado claramente su compromiso con el desarme total y permanente de las armas nucleares.
“Sin embargo, hasta ahora no solo no han dado ningún paso serio para lograr ese objetivo, sino que también esos países, y sobre todo Estados Unidos, han seguido una tendencia siempre acelerada en la modernización de sus armamentos por un lado, y en la mejora del estado de sus armas nucleares de acuerdo con sus doctrinas militares de seguridad, por el otro”, ha censurado el diplomático iraní.
Jatibzade ha sostenido que la República Islámica de Irán, de acuerdo con sus políticas básicas, enfatiza la necesidad del desarme internacional de todas las potencias nucleares e insiste en la necesidad de aprovechar la energía nuclear con fines pacíficos para todos los países, según reporte de Hispantv.
“Tanto la posesión como el uso de tales armas no convencionales es siempre contraria a todas las reglas de la humanidad, así como a los compromisos internacionales, por lo que Irán anuncia su disposición a una cooperación constructiva con la comunidad internacional destinada a materializar un mundo libre de todo tipo de armas nucleares”, ha apostillado.
El 6 de agosto de 1945, un bombardero estadounidense B-29 bautizado Enola Gay arrojó una bomba de uranio dotada de una fuerza destructora equivalente a 16 kilotoneladas de TNT. Tres días después repitió el ataque atómico en Nagasaki, forzando la rendición incondicional de Japón y, con ello, el final de la Segunda Guerra Mundial.
Tras los devastadores ataques, que dejó al menos 210 000 muertos en este archipiélago asiático, el propio EE.UU. confesó que no había necesidad militar de usar la bomba.
Sin embargo, 76 años después de esta catástrofe, EE.UU. sigue sin pedir perdón a Japón y a las víctimas por esta atrocidad histórica. Además, es el único país del mundo que ha utilizado bombas atómicas y sigue aumentando sus arsenales nucleares. /JML