Onudi: Latinoamérica va por el camino de un futuro sostenible
El oficial de Desarrollo Industrial de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (Onudi), Alfredo Cueva, afirmó que el tema de la “basura electrónica” ha cobrado suma importancia en los últimos tiempos, sobre todo en América Latina. «Debido al crecimiento económico acelerado y al nivel de desarrollo de la región» y a la acumulación de las mismas.
Como una medida de prevención ante el vertiginoso aumento de los residuos electrónicos en el continente, donde el 97% de ellos se gestionan de manera inadecuada, la Onudi propuso el proyecto ONUDI-FMAM para el “fortalecimiento de las iniciativas nacionales y mejora de la cooperación regional para el manejo ambientalmente racional de los COP en los desechos de equipos eléctricos o electrónicos (RAEE)”, implementado desde el año 2018 y culminado recientemente el pasado año 2024.
El mismo asiste a 13 países de la región en cuanto a asesorías para la actualización de regulaciones en el área; también busca armonizar aspectos clave de las políticas de residuos electrónicos, fortalecer la cooperación regional e intercambiar conocimientos que permitan el reciclaje óptimo para el aprovechamiento de materiales reutilizados, además de capacitar y sensibilizar al personal técnico. De esta manera se protege el ambiente de los residuos peligrosos, recupera materias primas y proporciona productos restaurados, alargando su vida útil.
Según el informe elaborado por el Programa de Ciclos Sostenibles (Scycle), copatrocinado por la Universidad de las Naciones Unidas (UNU por su sigla en inglés) y el Instituto de las Naciones Unidas para la Formación Profesional e Investigaciones (Unitar), participan países como Argentina, Bolivia, Chile, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá, Perú, Uruguay y Venezuela.
Dentro del marco del también llamado “Proyecto Residuos Electrónicos América Latina (PREAL)”, se han desarrollado diversas estrategias para fortalecer las capacidades de cada nación en cuanto a su propia necesidad en temas relacionados con el manejo ambientalmente racional de los RAEE, incluyendo la recolección, tratamiento, reciclaje y la gestión de contaminantes peligrosos.
Un componente clave de este proyecto ha sido la capacitación y formación de casi 15 mil personas en Chile, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Panamá y Venezuela, así como también se han enviado 230 toneladas métricas de equipos como computadoras, celulares y electrodomésticos para su gestión ambientalmente racional. Es importante considerar que, a pesar de los altos índices de desechos que se generan en América Latina y el Caribe, existen países con instalaciones para el tratamiento de residuos electrónicos especializados para algunas categorías y/o determinados productos.
Venezuela cuenta con instalaciones que realizan actividades relacionadas con el tratamiento de RAEE donde se puede destacar la conformación de los comités (nacional y científico) de RAEE y el fortalecimiento de las mesas técnicas de aseo, esto como resultado del trabajo conjunto entre el Estado venezolano, organizaciones no gubernamentales, sector privado e instituciones educativas que buscan establecer un marco para la gestión adecuada de estos residuos.
Cayapa Heroica: Reutilización y resiliencia tecnológica en Venezuela
Una de ellas es el Plan Nacional Cayapa Heroica, como iniciativa de la Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit), impulsada por el Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología (Mincyt). Si bien su objetivo principal se centra en la recuperación y reparación de equipos médicos, tecnológicos y de telecomunicaciones, esenciales para el funcionamiento de instituciones públicas, educativas y hospitalarias, su labor contribuye significativamente a la reutilización de equipos electrónicos y eléctricos.
Al reparar y poner nuevamente en funcionamiento más de 6 mil dispositivos hasta la fecha, que de otra forma podrían convertirse en residuos, la Cayapa Heroica no solo optimiza recursos y fortalece la independencia tecnológica del país, sino que también promueve una cultura de reutilización y extiende la vida útil de los equipos, mitigando así la generación de RAEE y fomentando prácticas más sostenibles.
En este sentido, Jarson Manjarrés, jefe de la Unidad de Sistemas Inalámbricos de la Fundación Cendit mencionó que, en el proceso de reparación de estos equipos electrónicos y eléctricos, se pueden reutilizar componentes de algunos que estén dañados para reparar otros.
“En el caso de la Fundación, ofrecemos apoyo a otras instituciones hermanas en la revisión, mantenimiento correctivo y preventivo, y reparación de distintos equipos; un ejemplo de ellos son las fuentes conmutadas que se usan para alimentar de energía el servidor de las radiobases, para que estas puedan transmitir en óptimas condiciones las señales móviles o de Internet. Desde el 2021 hasta la fecha tenemos un aproximado de 400 equipos de este tipo que se han recuperado satisfactoriamente”, señaló.
De la misma manera, el país cuenta con un conjunto de instrumentos legales y normativas que tienen como finalidad regular los desechos peligrosos; una de ellas es la recién publicada Resolución N.º 022, establecida el pasado 30 de abril del 2024. Esta normativa representa un avance significativo para Venezuela, específicamente en el tema de la gestión de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE).
Este tipo de reglamento se dispone a fin de reducir la generación de RAEE, promoviendo prácticas de consumo responsable y la extensión de la vida útil de los aparatos electrónicos. Acompañada del ordenamiento jurídico de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, Ley Orgánica del Ambiente, Ley Penal del Ambiente y la Ley de Gestión Integral de la Basura. En este sentido, el Estado venezolano busca asegurar el aprovechamiento, valorización y disposición final adecuada de estos residuos, fomentando la recuperación de materiales valorizables y minimizando los impactos ambientales negativos.
La gestión responsable de los residuos electrónicos es una tarea urgente y necesaria. El futuro del planeta y la salud de las personas dependen de ello. Es un desafío global que exige la atención y la acción coordinada de todos. Concienciar sobre el impacto ambiental y en la salud de estos desechos, promover prácticas de consumo responsable, apoyar iniciativas de reutilización y reciclaje e impulsar el desarrollo de marcos legales sólidos son pasos fundamentales para construir un futuro más sostenible y proteger nuestro planeta para las generaciones futuras.
Fuente: Prensa Cendit
VTV/DR/CP