Mes y medio antes | 25 de febrero: Trump, jactándose, “ni un solo muerto» por Covid-19 en EE.UU.

Este miércoles, el epicentro de la pandemia global por coronavirus, EE.UU., alcanzó el récord lamentable de 844 mil 440 personas contagiadas por la Covid-19, de las que 25.696 se incorporaron en la jornada de ayer, y sumando exponencialmente víctimas fatales para llegar a 47 mil 227 muertes, de las cuales más de 1.909 se produjeron en las últimas 24 horas.

La alta tasa de mortalidad se produjo en apenas un poco más de mes y medio, contado a partir del 25 de febrero cuando el propio presidente estadounidense, Donald Trump, publicó un mensaje en sus cuentas en las redes sociales alabándose a sí mismo.

Hace seis semanas atrás, había celebrado que su administración estaba llevando a cabo «un gran trabajo» junto a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) a la hora de enfrentar la Covid-19 y evitar que se produzcan muertes en su país.

«Los CDC y mi administración están haciendo un gran trabajo al manejar el coronavirus, incluido el cierre temprano de nuestras fronteras a ciertas áreas del mundo», escribió el mandatario. «Hasta ahora, por cierto, no hemos tenido ni una muerte. ¡Mantengámoslo de esa manera!«, escribió entonces, según reseñó el 26 de febrero la agencia RT.

Trump alaba el "gran trabajo" de su gobierno respecto al coronavirus y se jacta de que "de momento no hay ni un solo muerto" por el covid-19 en EE.UU....pero en febrero
Trump alaba el «gran trabajo» de su gobierno respecto al coronavirus y se jacta de que «de momento no hay ni un solo muerto» por la Covid-19 en EE.UU….pero en febrero

Trump escribió ese mensaje cuando el número de casos en el país era de 53 infectados, por lo que aseveró triunfante: «el coronavirus está bajo control en EE.UU.»

«No importa qué tan bien lo hagamos, sin embargo, el punto de discusión de los demócratas es que nos está yendo mal. Si el virus desapareciera mañana, dirían que hicimos un trabajo realmente pobre e incluso incompetente«, auguró proféticamente el inquilino de la Casa Blanca.

Un mes y medio después, en medio de una tragedia espeluznante que no quiere reconocer, Trump le ha echado la culpa a todos los que critican su gestión negligente, se atrevió a responsabilizar a China (pese a que ésta ha enviado cargamentos humanitarios a EE.UU. para ayudarlos) y hasta arremetió contra la Organización Mundial de la Salud (OMS) a la que “sancionó” retirándole las contribuciones financieras de EE.UU.

La última conducta de su evidente desquiciamiento, es azuzar a sus seguidores armados para que salgan a la calle a enfrentar a aquellos gobernadores que mantienen cuarentena y medidas epidemiológicas de contención, para que las eliminen y “salvar” la economía estadounidense.

/maye