El metano puede ser la clave para buscar signos de vida en los exoplanetas
Si la vida es abundante en el universo, el metano (CH4) atmosférico podría ser el primer indicio de su existencia fuera de la Tierra que podrían detectar los astrónomos. Aunque este gas se puede originar por procesos no biológicos, un nuevo estudio realizado por científicos de la Universidad de California en Santa Cruz (EE.UU.) establece una serie de circunstancias en las que se podría argumentar de forma convincente que organismos vivos lo emiten a la atmósfera de planetas rocosos.
Los investigadores, que publican su trabajo en la revista PNAS, han examinado primero las fuentes geológicas de metano y han evaluado el potencial de estas para mantener una atmósfera rica en este gas. Entre ellas se encuentran los volcanes, las reacciones entre el agua y la roca en entornos como las dorsales oceánicas, las fumarolas hidrotermales y las zonas de subducción tectónica, así como los impactos de cometas o asteroides.
Los autores han comprobado que todos estos procesos no producen fácilmente atmósferas planetarias habitables ricas en metano y dióxido de carbono (CO2) y con poco o ningún monóxido de carbono (CO), justo las condiciones óptimas para encontrar signos de vida. La desgasificación de los volcanes, por ejemplo, añadiría metano pero también CO a la atmósfera.
El metano puede tener un origen geológico o biológico, pero si se detectara en la atmósfera de un exoplaneta rocoso junto a niveles altos de dióxido de carbono y muy bajos de monóxido de carbono podría ser un indicio de vida @ucsc https://t.co/FVN5B0mrw4
— Agencia Sinc (@agencia_sinc) March 30, 2022
“El mejor contexto para que el metano atmosférico sea una biofirma de un exoplaneta es el de un planeta rocoso con abundante metano y CO2 atmosféricos, y con poco o ningún CO”, explica a SINC la astrofísica y autora principal Maggie Thompson, de la universidad estadounidense.
“Esto se debe al fuerte desequilibrio químico redox entre el CH4 y el CO2, que hace difícil que los procesos abióticos generen ambos gases. Además, si el metano es producido por organismos vivos, esperamos que haya poco o ningún CO en la atmósfera porque la vida lo consume fácilmente”, continúa.
La astrofísica añade que la densidad del planeta también indica si es rocoso, como la Tierra, es decir, que no tenga demasiada agua: “Los planetas con composiciones extremadamente ricas en agua no tendrían densidades rocosas y podrían generar una cantidad significativa de metano atmosférico de forma abiótica”.
VTV/CC/CP
Fuente: SINC