Unicef aboga por medidas sanitarias más seguras para mantener abiertas escuelas
En estos momentos urge evitar un daño continuo al aprendizaje y bienestar de los estudiantes, resaltó la Unicef.
Aunque los cierres de los centros escolares se redujeron considerablemente en octubre, desde el 1 de diciembre esa entidad registra que 20 por ciento de los estudiantes del mundo están afectados nuevamente y lejos de las aulas en medio de la nueva oleada de contagios, reseñó nota de Prensa Latina.
Incluso, en muchos lugares los centros escolares no han vuelto a abrir desde la aparición del coronavirus SARS-CoV-2 en sus territorios.
De ahí que la Unicef pidió dar prioridad a la reapertura de las escuelas mediante la aplicación de todas las medidas sanitarias necesarias para que las aulas sean lo más seguras posible.
Según indicó el jefe de Educación de Unicef, Robert Jenkins, evidencias demuestran que las escuelas no son los principales puntos de propagación de la pandemia y su cierre debería aplicarse como último recurso, pues tiene un impacto en el aprendizaje, bienestar mental, físico y seguridad de los menores.
Los beneficios de mantener esas instituciones abiertas superan con creces los costos de cerrarlas, aseveró.
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia considera que muchos países no toman todas las provisiones necesarias para que las escuelas estén a salvo de la COVID-19 y esto conlleva a su cierre innecesario.
/JB